Si bien Taha-Moretti 1 ya ha mencionado a Frankenstein como una obra que ha sido reivindicada en relación a aspec-tos éticos de la medicina 4, debemos comentar que la noche del nacimiento de este clásico romántico es conocida en el mundo de la literatura como "la noche de los monstruos", la cual tuvo lugar en Villa Diodiati el 16 de junio de 1816, en donde participó el grupo formado por Lord Byron, los Shelley y Polidori. Por otra parte, dado que he considerado una futura carre-ra como escritor literario en algún punto de mi vida, me veo en la necesidad de hacer mención de algunas aportaciones que considero forzosa su remembranza. Slaughter (1908-2001), quien hubo de escribir un gran com-pendio de novelas los cuales mostraban a las masas la vida de un médico militar y los avances tecnológicos 3. Debemos recordar que todas las áreas de la medicina conllevan una particularidad para inferir situaciones y resolver problemas asimismo, la asequibilidad con la cual somos agraciados nos ha hecho tener a nuestro alcance nuevas tecnologías haciéndonos vivir experiencias únicas a lo largo de nuestra carrera, es así como Michael Crichton (1942-2008) escribió obras únicas que desencade-naron un nuevo género literario 2.
Al igual que Taha-Moretti 1, coincido con la inherente rela-ción que existe entre la literatura y la medicina desde tiempos inmemorables, cuyo motivo es sin duda una interrogante es quizás debido a la habilidad adquirida para relatar y docu-mentar gran cantidad de información siendo trasmitida de una forma digerible para otros. Me permito a dirigirme a Usted con la finalidad de hacer algunas aportaciones tras haber leído en días previos el artí-culo publicado dentro de esta periódica de título "los médicos cirujanos y la literatura" 1.